Las autoridades revelaron un supuesto plan terrorista que tenía como blanco conciertos multitudinarios, estaciones de metro y Times Square.

El caso data del verano de 2016. Funcionarios dicen que dos hombres de 19 años, uno canadiense y otro estadounidense, habían planeado detonar bombas en varias ciudades, en nombre del Estado Islámico. 

Uno de esos ataques, supuestamente, incluía activar un coche bomba en Times Square.

Según los fiscales, los extremistas compraron materiales para fabricar bombas y planearon llevar a cabo los ataques durante el mes sagrado de Ramadán.

Una tercera persona de Filipinas, supuestamente, financió la operación.

Sus objetivos también incluían el metro de la ciudad y algunos neoyorquinos nos expresaron su preocupación ante un posible ataque: "Sí, todos los días me da miedo montar al tren, todos los días, no sé si me va a pasar algo a mí". Otra persona añdió: "Sí me preocupa porque es la seguridad de todos, pasa algo y una no sabe qué persona está al lado tuyo que te puede hacer algo, y es bueno que los hayan capturado". 

Los individuos también habían hecho planes para llevar a cabo tiroteos masivos en conciertos multitudinarios. Sin embargo, sus planes fueron frustrados por un agente encubierto del FBI.

Uno de los sujetos se enfrenta a cadena perpetua cuando sea condenado en diciembre. Los otros dos fueron arrestados en el extranjero y se encuentran en espera de extradición. 

Dos de los detenidos habrían confesado al agente que estaban en contacto con ISIS y que querían provocar un nuevo 11 de septiembre.