Los nacionalistas blancos regresan a Charlottesville para protestar por la remoción de una estatua confederada.

El polémico activista Richard Spencer convocó a decenas de supremacistas blancos llevando antorchas “tiki” al Parque de la Emancipación, cerca de una estatua cubierta del general rebelde Robert E. Lee.

Bajo gritos y cantos los manifestantes declaraban que no serían reemplazados. 

Spencer más tarde tuiteó que el rally fue un gran éxito.

El alcalde de la ciudad, Mike Signer, se mostró indiganado por la protesta.

Escribió en twitter y citamos, "Otra visita despreciable de los cobardes neo-nazis. ¡No son bienvenidos aquí!  ¡Váyanse para sus casas! Mientras tanto miraremos todas nuestras opciones legales”.

Spencer respondió diciendo: 

"Fue genial estar de vuelta en Charlottsville, podemos ponernos al día la próxima vez que estemos en la ciudad". 

Hace dos meses la ciudad quedó paralizada por violentas protestas sobre el mismo tema.

Una mujer fue asesinada después de que un partidario blanco nacionalista la arrollara con su automóvil mientras ella y otros manifestantes participaban en una marcha opositora.