La nueva escalada de violencia de las pandillas en El Salvador es una "acción deliberada" de tales grupos criminales para presionar al gobierno a que les otorguen beneficios en prisiones e incluso pactar otra tregua, de acuerdo con las autoridades.

La alarmante ola de asesinatos hizo de septiembre uno de los meses más violentos del año, con 435 homicidios, y la Iglesia católica exigió el domingo que "se tomen las medidas más convenientes para controlar y superar esta preocupante situación". 

"Estamos sumamente preocupados. Esta es una situación gravísima que tiene que resolverse cuanto antes", señaló el arzobispo capitalino, monseñor José Luis Escobar Alas, en conferencia de prensa. 

Si bien afirmó que las medidas que ha tomado el gobierno ayudan, Escobar criticó que hayan salido a las calles vehículos militares equipados con ametralladoras, mientras soldados y policías armados con fusiles M 16 controlaban los puntos más concurridos de San Salvador.

"Sacar los tanques de guerra para exhibirlos en los parques, no lo entiendo, no lo alcanzo a comprender cuál es la intención, pero eso no es forma de enfrentar el problema", añadió. 

Insistió que debe haber un plan a mediano y largo plazo, "pero efectivo, donde de verdad cambien las cosas, porque una de las causas de la violencia es la exclusión social. 

"Las zonas más pobres que sufren más violencia, siguen siendo sumamente excluidas, no tiene ningún apoyo, ni siquiera de salud y es necesario cambiar las caras de esos lugares", sentenció. 

Las autoridades de seguridad pública manejan la hipótesis que el incremento de los homicidios se debe a una guerra entre pandillas, pero el criminólogo y experto en temas de seguridad Ricardo Sosa dijo a The Associated Press que "esto no tiene fundamento porque la mayoría de las víctimas no tiene relación con las pandillas". 

Según un reporte oficial, en septiembre se contabilizaron 435 muertes violentas, 92 más más que en el mismo mes de 2016 cuando se registró 343. En términos porcentuales se registró un incremento 27% de homicidios. 

Sosa dijo que solo en una semana fueron asesinadas 271 personas y señaló que el 23 de septiembre se confirmaron 40 homicidios. 

Si bien septiembre registró un incremento de la violencia, el director de la policía, comisionado Howard Cotto asegura que están ganando la batalla contra el crimen y que según las cifras oficiales hay una reducción de los homicidios de 32%. 

El 2016 cerró con 5.278 personas asesinadas, un promedio de 14,4% muertes diarias y en lo que va del año reportan un promedio de 10,3%. 

En El Salvador, las pandillas establecidas en barrios populosos y comunidades están integradas por más de 67.000 jóvenes y adultos. Sus principales cabecillas están en una cárcel de máxima s