El buque Arctic Sunrise, anclado en el muelle 6 de Brooklyn tiene una misión especial: reconstruir Puerto Rico, devastado por el huracán María.

"Este barco tiene el plan de mandar ayuda y recursos. Pero no solamente en términos de lo que es necesario ahorita, pero lo que es necesario para una recuperación justa", explicó Cindy Wiesner, de la organizacion Grassroots Global Justice Alliance.

Artic Sunrise, el "Amanecer Ártico" tiene 166 pies de longitud y es propiedad de Greenpeace, organización que promueve el medioambiente. La nave llevará bicicletas, paneles solares, baterías, equipos de agricultura y semillas. La idea es que Puerto sea reconstruido pensando en el beneficio al medioambiente. 

La carga se llevaría en el "casco" del buque el cual tiene bandera holandesa. El problema es que la llamada Ley Jones exige que para transportar mercancía a Puerto Rico desde otro puerto estadounidense la nave tiene también que ser de bandera y tripulación estadounidense. Greenpeace está tramitando una excepción a la ley. 

"Básicamente lo que Estados Unidos está diciendo es que no solamente no nos van a ayudar, pero no van a permitir que otras personas nos ayuden tampoco. Esto básicamente nos está diciendo a la comunidad puertorriqueña que nosotros no valemos en este país", dijo Elizabeth Yeampierre, directora ejecutiva de Uprose.

La organización señala que de no poder conseguir el permiso contratarían los servicios de otro bote para poder cumplr con su misión.

"Esta es una alternativa extremadamente costosa y preferimos gastar ese dinero en comprar más paneles solares para Puerto Rico,  en vez de pagar por otro barco cuando ya tenemos uno", dijo Annie Leonard, directora ejecutiva de Greenpeace, USA.

El costo de un barco adicional de Miami a Puerto Rico serían 90 mil dólares.  El "Artic Sunrise" zarpa este martes. Llegará a la Florida en un mes para recoger la ayuda. Durante el recorrido hacia el sur hará varias escalas para promover la protección al mediio ambiente