El gobernador de Puerto Rico Ricardo Rosselló exigió a la entidad eléctrica de la isla cancelar el contrato de 300 millones de dólares con la empresa Whitefish Energy Holdings el domingo, en medio de un mayor escrutinio del papel que la compañía de Montana juega en las labores de recuperación del huracán María.

El anuncio de Rosselló se produjo al mismo tiempo que las autoridades estadounidenses investigan cómo se llegó al contrato que beneficiaría a la pequeña empresa originaria del pueblo del secretario del Interior, Ryan Zinke. El gobernador indicó que se han pagado 8 millones de dólares a Whitefish. 

El portavoz de Whitefish Chris Chiames indicó a The Associated Press que la compañía emitiría su postura pronto. El portavoz de la empresa eléctrica Carlos Monroig no respondió de inmediato a pedidos de comentario.

Rosselló dijo que pidió a equipos de Nueva York y Florida ir a la isla para ayudar a restaurar la energía en Puerto Rico mientras que criticó al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos por no cumplir sus objetivos. La agencia no pudo ser contactada para dar detalles.

Las auditorías del contrato de Whitefish a nivel local y federal están en curso. El gobernador también anunció el nombramiento de un coordinador externo para supervisar la división de compra y de contratación de la compañía eléctrica. 

Aproximadamente el 70% de la isla continúa sin energía tras más de un mes de que el huracán María azotó a Puerto Rico el 20 de septiembre como tormenta de categoría 4 y con vientos de hasta 245 kilómetros por hora (154 millas por hora). 

El director de la compañía eléctrica Ricardo Ramos había dicho que la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico llegó a un acuerdo con Whitefish días antes de que el huracán azotara a la isla. Señaló que habló con al menos otras cinco compañías que exigieron cantidades similares, además de un pago inicial que la agencia no tenía. Ramos indicó que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de Estados Unidos (FEMA por sus siglas en inglés) había aprobado el acuerdo, acción que la agencia negó. 

La FEMA dijo que no había aprobado ninguna solicitud de reembolso para la compañía eléctrica por dinero para cubrir las reparaciones en el sistema eléctrico de la isla. El contrato estipulaba que la empresa no cubriría los costos inadmisibles bajo las subvenciones de la FEMA, pero también indicaba que "el gobierno federal no es parte de este contrato".