La muerte del pequeño Elijah Silvera por choque anafiláctico, después de haber ingerido un bocadillo con queso en la escuela a pesar de la alergia que sus padres registraron con el centro de estimulación temprana, no será en vano. 

Las autoridades aseguraron que el gobierno de la ciudad reajustará protocolos de seguridad en todo el sistema preescolar.

De acuerdo con  Lorelei Vargas, subcomisionada Cuidado y Educación Preescolar: "La ciudad va a presentar nuevas regulaciones para que todos los centros que cuide niños tengan que llamar al 911 si hay una emergencia médica".

Mientras la investigación sobre los hechos que condujeron a la muerte del menor de 3 años continúa, incluyendo por qué la escuela presuntamente desperdició valiosos minutos llamando a su madre en lugar del número de emergencias, los padres latinos continúan preocupados.

"Es un poquito preocupante, claro, porque mi hija tiene alergias. Uno se preocupa pero me siento que aquí son bien estrictos con eso y espero que todo siga así", expresó una madre de familia.

Alguien más añadió: "Es una tragedia lo que pasó. A mí me preocupa porque también mi hijo tiene alergia a la penicilina y, entonces es algo que también quiero que puedan llamar a la ambulancia antes de que nos llamen a nosotros para prevenir que pase algo así".

ACS, la agencia que supervisa las guarderías y centros de estimulación temprana y Pre-K anunció el cierre permanente del Seventh Avenue Center for Family Services, por ignorar el plan de emergencias familiar en el caso de Elijah.