Cientos de inmigrantes como Sonia tienen en nuestra ciudad a un ejército de aliados para enfrentar la amenaza de la separación de sus familias por su condición de indocumentados.

"Migración llegó a mi casa en el 2008. En el 2008 yo estaba en supervisión, supervisión cada tres meses, seis y ahora cada año. Ahora que entró el nuevo presidente, en agosto 8 me dijeron que, automáticamente, hicieron mi orden de deportación. Tener a la coalición al lado de uno es una bendición porque es un conjunto de personas que te acompañan no te sientes solo. Aunque siempre uno está nervioso, al tener a todas esas personas alrededor tuyo se siente más fuerza, más apoyo", detalla Sonia.

La organización Nueva Coalición Santuario cumple 10 años de proveer el acompañamiento de ciudadanos estadounidenses voluntarios como testigos en las audiencias migratorias, así como ofrecer apoyo legal a los inmigrantes y un fondo para pagar sus fianzas, además de santuario físico.

El reverendo Juan Carlos Ruiz, uno de sus organizadores, expresó al respecto: "Se le llama Héroes sin Capa porque mucha de nuestra gente que realmente ha estado trabajando acompañando a nuestras familias, abogando por nuestras familias es gente ordinaria, ciudadanos que se han comprometido a ser aliados".

A una década de su creación por las familias que enfrentaban la deportación, la coalición agrupa a numerosas congregaciones religiosas y coordina acciones con otros grupos pro-migrantes.

"Quisimos Desde el principio romper este molde que los que están siendo deportados solamente son latinos", añade el Rev. Ruiz.

Por su parte, la presidenta del Concejo, Melissa Mark-Viverito, expresó al respecto: "Están comprometidos a crear un espacio seguro, un espacio santuario para las comunidades inmigrantes que están apoyando un esfuerzo donde vamos a tener una política pública en esta nación que va a abogar por leyes inmigrantes más justas".

Tan solo en el último año la coalición ha atendido 800 casos. Según sus miembros todos los abogados que colaboran con ella tienen la convicción de que la comunidad necesita contar con herramientas y conocimiento legal básico para poder defenderse.