En menos de un mes, el nuevo director ejecutivo del Museo del Barrio participará en su primer desfile de los Reyes Magos, uno de los eventos más emblemáticos de esta institución cultural. 

Pero por ahora, gran parte de la atención de Patrick Charpenel, quien tomó las riendas del museo apenas en octubre, ha estado centrada en la renovación de este espacio y sus galerías que permanecerán cerradas durante los próximos seis o siete meses. 

"Estamos en el proceso de ampliar la oferta y crecer como institución. Lo que estamos haciendo es mejorar nuestras instalaciones que es indispensable y fundamental para poder exhibir y conservar las obras en las mejores condiciones", señala Charpenel.

A pesar del cierre temporal del Museo, Charpenel, nacido y criado en México, dice que la institución no se ha quedado cruzada de brazos y sigue ofreciendo programas educativos, especialmente para niños de la comunidad. Bajo una nueva iniciativa también está formando alianzas con centros de estudios alrededor de la ciudad. 

El Museo del Barrio fue fundado a finales de los años 60 con el fin de resaltar y celebrar las contribuciones culturales de los puertorriqueños. Uno de los grandes retos hoy en día es ser fiel a esa misión pero, a la vez, reflejar los cambios demográficos en la ciudad especialmente entre la comunidad latina.

Charpenel ahonda al respecto: "Somos un museo que le queremos dar un lugar muy importante al Caribe y a Puerto Rico, la historia revela que su origen se debe a este sector. Pero somos un museo que defiende mucho el valor de diversidad e inclusión y como consecuencia de esos valores y de esa visión nos hemos abierto a representar a los latinos en un sentido más amplio y más complejo".

Pero quizás el reto más importante que enfrenta como director del Museo del Barrio es superar los serios problemas financieros y recortes de personal de los últimos años. Asegura que el museo está a punto de salir de un déficit, gracias al exitoso trabajo de recaudación de fondos en los últimos dos meses. 

Charpenel asegura estar convencido de que el museo puede asumir el rol de embajada cultural, capaz de mostrar las tensiones y la complejidad de nuestras comunidades. 

"Una de las cosas que vamos a probar como institución y museo es que es imposible pensar en Estados Unidos, en su historia , en su cultura y su identidad sin poner en un lugar muy importante a los latinos", concluye Charpenel.