Al sonido de las campanas y con velas encendidas, se leyeron los nombres de las 12 víctimas del último gran incendio del Bronx. 

Un hermoso servicio religioso realizado en la iglesia católica de Nuestra Señora del Monte Carmelo, a tan solo pocas cuadras de lugar del siniestro.  

Una de las asistentes compartió su opinión: "Muy lindo, muy lindo. Estuvo muy bien, la verdad pues sí, con todo lo que hemos pasado teníamos que estar aquí con ellos, ¿verdad? Y esperemos que no vuelva a suceder más". 

Llanto de dolor de las familiares de víctimas que todavía no asimilan la pérdida de sus seres amados. 

Allí se levantaron a entonar una canción de despedida para sus seres queridos bajo fuertes aplausos de los presentes. 

Otra persona expresó sus impresiones: "Muy triste, esperemos que Dios los tenga en la gloria a todos los que se fueron, los damnificados también que pronto agarren alivio. Y este, pues a orar por ellos". Alguien más opinió: "Conmueve el corazón de verdad que eso si es fuerte, perder una familia entera es demasiado dolor".  

El incendio en el 2363 de la avenida Prospect fue el más mortífero de la ciudad después de la tragedia en el club social Happyland en 1990, también en El Bronx, donde 87 personas perdieron la vida.   

Según la investigación, el siniestro fue provocado por un niño de tres años que estaba jugando con la estufa en el primer piso.

La comunidad está unida recaudando fondos, ropa y comida para ayudar a las 22 familias desplazadas por el incendio mientras se realizan los preparativos para despedir a las 12 víctimas mortales del incendio.