La Autoridad Metropolitana del Transporte (MTA, por sus siglas en inglés) prepara la renovación de su envejecida flota y ha encargado más de 1,600 nuevos vagones, algunos, hechos aquí mismo en Nueva York. 

La compañía japonesa Kawasaki, que tiene una planta en Yonkers, ensamblará parte del pedido; el resto se armará en Nebraska.

Un prototipo de los vagones encargados se exhibió el año pasado en la estación de la calle 34, en Hudson Yards.

El pedido, de $1,400 millones de dólares, que todavía debe ser aprobado por la Junta de la MTA la próxima semana, incluye trenes con puertas más amplias, diseñadas para reducir las demoras gracias a un embarque más rápido.

También habrá 20 vagones interconectados (estilo pasarela abierta) que aumentará la capacidad de los trenes al permitir que los pasajeros usen el espacio entre un vagón y otro, que ahora suele estar vacío.

La MTA espera comenzar el despliegue de los nuevos trenes en 2020.

75 de ellos se pondrán en servicio en el ferrocarril de Staten Island.