Residentes de dos edificios en Sunset Park se cansaron, dicen, de sentirse discriminados únicamente por el hecho de ser Latinos y demandaron a los caseros. Alegan que sólo a los hispanos le piden papeles de inmigración en sus contratos de renta y que le han subido los costos de alquiler para que se vayan. 

Uno de los residentes vivió alquilando en ambos bloques. Primero en el 601 de la Calle 40 esquina con la 6ta Avenida por 25 años. Y luego otros 15, en el Edificio 614, hasta que según relata, no pudo más. 

''(El dueño) Le hace la vida imposible a la gente, busca maneras pa' llevarte a la corte. El te lleva a la corte por nada. Yo empecé con $600. Cuando el cogió el 'building' me llevó a $860 y cuando me mudé, al otro mes ya tenía ese apartamento rentado por $2,700 dólares", detalló el vecino quien vivió en uno de los edificios en cuestión.

La demanda fue presentada por la Sociedad para la Ayuda Legal y la firma de abogados Cahill, Gordon y Reindell, en el Tribunal del Distrito Este en Nueva York en contra de las sociedades Little City Realty y Little Boy Realty, ambas operadas por Adel y Linda Eskander.

En la demanda se alega prácticas discriminatorias en contra de latinos -la mayoría con rentas estabilizadas.

Algunos vecinos dijeron que los caseros también prohiben banderas de países hispanos. 

"No quería banderas fuera de las ventanas, ni la bandera boricua ni nada de eso.."

Un asistente legal de los demandantes explicó lo que encontraron durante la investigación. 

"Vimos que el dueño estaba pidiendo a los inquilinos latinos que tenían que mostrar prueba de su ciudadanía y prueba del estatus de immigración".

Nos comunicamos con la oficina de uno de los dueños, Adel Eskander, pero este no devolvió nuestras llamadas. Los abogados de los demandantes dicen que Eskander 'persigue' y denuncia innecesariamente a los inquilinos a la Policía y otras agencias.  

También como parte de esta demanda, la Sociedad para la Ayuda Legal le va a pedir a un juez federal que no le permita al dueño de estos dos edificios iniciar algun tipo de acción legal contra los inquilinos, hasta que el caso sea visto.