Buenas noticias para los beneficiarios de DACA. Un juez federal de Washington obliga a la administración Trump a seguir con el programa y a aceptar, además, nuevas solicitudes si en 90 días no ofrece argumentos legalmente sólidos para justificar su fin.

El juez John D. Bates ha asegurado que la decisión del gobierno de poner fin al programa de acción diferida para inmigrantes llegados en su infancia es, y citamos, "virtualmente inexplicable" y por lo tanto, "ilegal".

Aun así, da 90 días al Departamento de Seguridad Nacional para que aporte un razonamiento más sólido que justifique el fin del programa. Si no lo hace, la orden se anulará y, además, el Departamento deberá de aceptar nuevas solicitudes.

El magistrado ha calificado la decisión del Presidente de "arbitraria y caprichosa".

Antes, otros 2 jueces, uno de San Francisco y el otro de Brooklyn, dictaron sentencias parecidas.