Un perro se está recuperando después de comer accidentalmente alimentos mezclados con alfileres en el parque Fort Tryon de Manhattan.
Su dueño, Terence Doherty, asegura que su mascota: Murphy, se enfermó después de comerse un sándwich del piso.
Además sacó varios alfileres de la boca del perro y lo llevó rápidamente al veterinario.
Doherty afirmó que cree que alguien puso las agujas a propósito y que el veterinario tuvo que extirpar quirúrgicamente ocho alfileres, que se pueden ver en las imágenes.
El dueño asegura que planea presentar una denuncia a la policía.