Daniel Castro trabaja en el supermercado Bravo de la calle 181 y Broadway por más de 20 años y en tres semanas, el negocio cerrará sus puertas.
"Es un poco triste sabe, porque nos vamos a quedar sin trabajo todos", comenta al respecto Castro.
El salvadoreño se unirá a las filas de los desempleados junto a otros 29 de sus compañeros.
El Supermercado y otro negocios localizados en el histórico edificio del antiguo Teatro Coliseo desaparecerán.
El edificio será demolido para dar paso a un nuevo centro comercial.
Humberto De León, dueño del supermercado que por 22 años ha servido esta área del Washington Heights, no cree que podrá reubicarse en el área: "Lo que están pidiendo de renta, los locales que están en el área, están pidiendo a $100 pesos por cada pie cuadrado y tú no puedes cubrirlo con un supermercado".
Y con el supermercado también desaparecerá una parte importante de la historia del vecindario.
El Teatro Coliseo fue el tercer recinto más grande en todo los Estados Unidos, al momento de su inauguración en 1920. Con 3,500 asientos, fue escenario de importantes obras teatrales durante sus años de apogeo. El edificio se convirtió en un cine a principios de los ochenta, pero cerró a finales de 2011.
El año pasado un grupo de residentes recaudó más de 8,000 firmas para pedir que fuera designado como un monumento histórico de la ciudad pero no lograron.
El concejal Ydanis Rodríguez nos compartió su opinión: "Debió de mantenerse abierto, como lugar histórico, para que la presente y la futura generaciones puedan regresar a saber la historia que representa este vecindario, que ha sido un vecindario construido por y debe ser para inmigrantes".
La Comisión de Preservación de Monumentos Históricos de la ciudad negó la petición, indicando que el edificio había pasado por varias modificaciones y ya no tenia su diseño original, por lo que no calificaba para esa designación.
Tratamos de contactar a los dueños del edificio, BLDG Management, pero no respondieron a nuestro solicitud.
Los negocios en el edificios del antiguo teatro deben desalojar para el 31 de mayo.
Esto dará paso al proceso de demolición de la estructura y después comenzar la construcción del nuevo proyecto.
