Sobrevivió a un relámpago

"Es como si yo siento que algún carro me golpea a mí y me manda al piso. Yo me mantengo consciente y digo algún loco me acaba de atropellar", así describe este inmigrante ecuatoriano su experiencia cuando le cayó un rayo.

Por varios años, todos los martes, Cuji Segundo, se reunía con sus amigos para jugar futbol en el parque Flushing-Meadows Corona. Pero este martes en la noche un relámpago cayó en el campo.

"Cuando veo la reacción de mis amigos y cuando veo al otro muchacho que también lo quieren ayudar entonces se me vino a la mente que fue algo, que fue un rayo que nos acaba de golpear a nosotros", detalla en exclusiva Cuji, quien no quiso mostrarnos su rostro para no preocupar a familiares.

Su amigo Giovanny Astudillo tambien fue alcanzado el por rayo, producto de las tormentas de este martes.  

"La peor parte la llevó él y a mí el rayo no me entra al cuerpo, sino me zumba, me bota al piso", añade Cuji.

En ese momento no podía mover sus piernas y temió por lo peor: "Mi reacción fue que Dios salve mis piernas porque muchas veces quieren amputar y mi reacción fue cómo va a reaccionar mi familia; yo voy a quedar a lo mejor inválido".

Las personas a su alrededor llamaron a la ambulancia, que no demoró ni cinco minutos en llegar. Él y su amigo Astudillo fueron hospitalizados. Astudillo se encuentra en estado grave en el Jacobi Medical Center.

Al respecto, este ecuatoriano expresa: "Quiero me mi amigo salga de ésta y lo pueda librar igual que yo. Y ruego a Dios que toda la familia tenga mucha fortaleza". 

Cuji asegura que habian revisado el tiempo y que no creían que llovería: "Cuando nosotros ya estábamos jugando comenzó como a oscurecerse tan rápido que nos sorprendió a todos".

El ecuatoriano está agradecido de haber sobrevivido que le cayera un rayo: "Tuve creo que un golpe de suerte porque yo no estaba a mucha distancia de mi otro amigo. La vida es única y es un regalo de Dios".

Cuji espera salir del hospital Elmhurst mañana. Una  tercera víctima alcanzada por un rayo,durante la tormenta del martes, solo que en el vecindario de Jamaica, ya está fuera de peligro. 

Sobrevivió a un relámpago