Han pasado casi dos décadas de los atentados del 11 de setiembre pero para Cecilia Herrera, quien estaba en una de las torres en el momento del ataque, el recuerdo continúa muy vivo...

“Estaba trabajando para “Reliance” y sentí el avión que se aproximaba y sentí el estruendo que hizo. Eso fue un impacto terrible”, detalló Herrera.

Tan terrible, dijo, que no había tenido el valor de regresar a la zona sino hasta 17 años después.

“Se siente una tristeza muy horrible, muy grande, porque en realidad uno ama a este país”, añadió Herrera.

En el decimoséptimo aniversario de los atentados, este martes en el Bajo Manhattan volvió a leerse un año más el nombres de las víctimas, seguido por un momento de silencio a las 8:46, la hora exacta en que el vuelo 11 de American Airlines alcanzó la Torre Norte.

Y casi 3 mil nombres fueron leídos incluyendo los que murieron en el Pentágono y en el vuelo 93 de United Airlines, que se estrelló en un campo cerca de Shanksville, Pensilvania. También recordaron el nombre de las seis víctimas del bombardeo del World Trade Center en 1993.

Alex Sánchez y Manuel Checo formaron parte del equipo de limpieza de escombros en la zona tras los atentados. La inhalación de polvo a la que estuvieron expuestos enfermó a Checo, que fue diagnosticado con un cáncer de boca.

“Gracias a Dios, sobreviví de la quimioterapia y la radiación pero sigo marcado por el resto de mi vida por esta terrible enfermedad”, reveló Checo.

Sánchez también sufrió problemas de salud pero se ha recuperado. Sin embargo la tragedia lo motivó a crear una organización que ofrece ayuda a indocumentados y personas que no hablan inglés y que trabajaron en el sitio de las torres. 

“Los nuevos estudios indican que hay 10 mil personas con cáncer y han fallecido 2100 personas. Y los fondos de las víctimas del 11 de setiembre se están agotando”, aseguró Sánchez.

Las secuelas de los problemas que emanaron de los escombros continúan, pero el espíritu perseverante del neoyorquino se ha fortalecido y resurgido con mayor optimismo.

“Han pasado 17 años y yo creo que nos hemos levantado con más fuerza”, dijo una visitante a la conmemoración.