El huracán Florence sigue causando grandes daños a lo largo de las costa de las Carolinas pese ha que ha sido degradado a tormenta tropical. 

De igual modo, ya se atribuyen varias muertes a la tormenta.

La policía de Wilmington, Carolina del Norte, reporta que una madre y su hijo murieron cuando un árbol cayó sobre su casa. El padre también resultó gravemente herido.

En la ciudad de Pender, los paramédicos no pudieron llegar a tiempo a atender a una mujer que sufrió un ataque cardíaco.

Las autoridades añadieron que alguien murió en el pueblo de Cooper mientras enchufaba un generador.

Las torrenciales lluvias han causado hasta dos pies de agua en algunas áreas y esto, según meteorólogos, podría causar que las inundaciones continúen hasta principios de la próxima semana. 

Miembros del equipo de Búsqueda y Rescate Urbano de la ciudad de Nueva York están en Carolina del Norte rescatando a las personas que decidieron sobrellevar la tormenta en casa.

Según se informa, más de 900,000 habitantes de las Carolinas carecen de electricidad.