Apoyarán a pequeños negocios en sus contratos de alquiler

Los locales comerciales vacíos se extienden por toda la ciudad. 

El concejal Mark Levine señala: "Nos quita vida de nuestras calles".

Y es que muchos pequeños negocios no son capaces de pagar la renta que el casero demanda cuando toca renovar el contrato. 

"Hoy día los inquilinos comerciales no tienen protección alguna", añade Levine.

Para mejorar la situación, el concejal del Alto Manhattan, Ydanis Rodríguez, presentó un proyecto de ley que establecería un proceso de arbitraje cuando casero e inquilino no logran ponerse de acuerdo. 

"Que se detenga la extorsión, donde un dueño de propiedad va y le pide doscientos mil, quinientos mil, un millón de dólares, para renovarle un lease a una persona cuando se le vence", apunta Rodríguez.

Aún está por ver el arbitraje terminaría siendo vinculante o no. 

Rodríguez pide a los dueños de pequeños negocios que acudan el lunes a la una de la tarde a la audiencia en la Alcaldía donde se debatirá la propuesta.  

Al respecto, la concejal Carlina Rivera, señaló: "Que todos los pequeños negocios pueden sentar en la mesa con los dueños, con los mismos recursos y que pueden negociar al mismo nivel."

Líderes comerciales, incluida la Cámara de Comercio de Manhattan, se oponen a esta legislación. Dicen que es una manera de implementar un control de renta de espacios comerciales.

El concejal Rodríguez lo niega: "Este bill  lo que establece es un proceso más justo en cómo se negocian los lease entre el pequeño negocio y los dueños de propiedades".

Uno de los últimos casos de renovación de alquiler frustrada es el de esta popular librería de SoHo, la McNally Jackson, que tendrá que mudarse a otro local del barrio. 

La dueña, Sarah McNally, dice que el casero quería casi doblar la renta, hasta $850,000 dólares. 

Defiende la propuesta del concejal Rodríguez, pero insiste en que es necesario eliminar deducciones fiscales que llevan a los caseros a dejar los locales vacíos. 

 

 

Apoyarán a pequeños negocios en sus contratos de alquiler