Sin poder contener su emoción, una vecina de nombre Dayan llevó un ramo de flores y una nota al restaurante donde trabajaba Yan Shiwen, un repartidor de comida que la noche de este sábado murió víctima de una bala perdida, en el sector de Forest Hills.

"Él era un hombre maravilloso, siempre con una sonrisa en su rostro", dijo Dayan.

Vecinos de Forest Hills lamentan el deceso de un repartidor de comida.

Según el informe policial, alrededor de las 9:30 de la noche del sábado, la uniformada encontró al individuo de ascendencia asiática, de 45 años de edad, inconsciente y con una herida de bala en el pecho.

El hallazgo se efectuó en la intersección de la calle 108 y el 67 Drive. Y aunque la víctima fue trasladada de inmediato al hospital Elmhurst, ya nada se pudo hacer para salvarlo y su muerte fue certificada en el nosocomio.

Julieta Londoño, otra vecina del área, comentó al respecto: "Uno se levanta pero no sabe si se vuelve a acostar. Puede ser en la parte más intranquila, todo puede suceder".

La inseguridad aflige a los repartidores de comida.

Varios trabajadores de un restaurante aledaño al local de comida china donde laboraba la víctima, aun no pueden creer lo que le sucedió a su amigo y compañero.

Así lo señaló Luis Díaz, un compañero de trabajo: "Este muchacho era buen trabajador, 18 horas al día trabajaba, venía a recoger delivery para nosotros, tenía su familia de tres hijas creo. Todos los días lo mirábamos, era un compañero de trabajo, estamos todos tristes. Todos tenemos familia y todos queremos regresar a la casa a la familia".

El repartidor de comida, quien manejaba una bicicleta, no habría sido el blanco del atacante; simplemente fue víctima de una bala perdida, disparada por un sujeto que habría huído en un auto Lexus de color gris.

Hildalyn colón, representante del Proyecto de Justicia Laboral, compartió su opinión sobre este asunto de la inseguridad: "La policía tiene que dar la protección que ellos se merecen como cualquier ciudadano y nos está faltando".

La preocupación ante crímenes como este, no es solamente de los repartidores de comida, sino de la población en general.