"Mantener y mejorar aún más nuestra seguridad, sigue siendo algo no negociable para nosotros en los trenes suburbanos".

Esto dijo el martes el director de seguridad de la Autoridad Metropolitana de Transporte, Patrick Warren, en una reunión de la junta directiva en la sede de la MTA, mientras mostraba fotos de agentes del orden interactuando con el público.

El dicho se da justamente cuando un reporte del departamento de Policía en la ciudad muestra un aumento del 40% en homicidios, asaltos y robos en este primordial sistema de transporte para los neoyorquinos.

Usuarios como Virgilio Ramírez han perdido la confianza.

"Siempre va a haber discusiones entre los políticos y las otras gentes que no cogen el 'subway' como nosotros", dijo Ramírez.

Justamente en la noche del lunes, un hombre de 27 años acuchilló a otro de 31 a bordo de un tren de la línea D luego de una discusión. Ambos fueron detenidos en la estación de la calle 47 y la sexta avenida, a una cuadra de Times Square.

“Lo único que uno quiere es llegar a su casa. Ir a trabajar y llegar a su casa a su familia", agregó Ramírez.

Apelando a los más escépticos en la reunión, un informe incluyó temas recientes como los más de mil 200 policías extras que patrullan el subterráneo y el plan para colocar cámaras en los vagones.

Pero además se habló de proveer con cámaras la totalidad de las 472 plataformas del subway en la Gran Manzana, anuncios constantes de la presencia de oficiales, y para hacerlos más visibles, quieren que se esparzan dentro de las terminales y no se queden parados en un mismo lugar.

 
Más vigilancia.

 

La directiva de la MTA y los usuarios, piensan lo mismo.

“Yo lo tomo todos los días durante la mañana y después en la tarde, y he visto policías pero quizás falta un poco más", dijo Karina Rosales.

Dicen que ya cuentan con 50 camas en centros de cuidado médico para ayudar a desamparados que necesitan tratamiento psicológico. Entrenan personal para asistirlos y a decenas les han dado residencia permanente.

Este último un punto espinoso para Rosales, quien dice tomar el tren mucho con su hijo de seis años y ve cosas no aptas para menores.

“Mucho vagabundo, harta droga. Cosas que quizás los niños a su edad, mi hijo tiene seis, no es bueno que vean".

También se hizo referencia a 52 casos en curso de acoso sexual en el sistema de trenes, y el pedido al sistema judicial para prohibirles la entrada de por vida. Informaron ya de uno en el condado de Suffolk, Staten Island.

Por último y no menos importante, con más policías también han aumentado las multas por todo tipo de violaciones, especialmente por evasión de pago de peajes.

Más de 300 multas diarias se dan a personas que tratan de pasar al Subway sin pagar. Un aumento del 54% en comparación con 2021. Esto es esencial si se toma en cuenta el hueco fiscal en el que la MTA se encuentra.