Sosteniendo las esposas que aseguraron sus manos cuando fue arrestado, familiares de la paramédica del departamento de Bomberos, Yadira Arroyo, celebraron la sentencia a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional para el hombre condenado por atropellar mortalmente a la rescatista en El Bronx hace casi siete años.

“Se hizo justicia", dijo Leida Acevedo-Rosado, madre de Arroyo.

"El sistema judicial no nos falló. Le dieron la sentencia que él se merece", agregó Alí Acevedo-Hernández, tía de Arroyo.

El asesino convicto en primer grado embistió mortalmente a Arroyo, una madre de cinco hijos de 44 años, con su propia ambulancia después de robar el vehículo en Soundview el 16 de marzo de 2017.

Sus abogados aceptaron su responsabilidad pero sostuvieron que el homicidio no fue deliberado porque aducen que José González se encontraba en un estado de "psicosis delirante" tras consumir PCP, una droga alucinógena.

"Yo pienso que en estos momentos ya ella puede descansar en paz, ya es tiempo de qué nosotros justicia, queremos reflejarnos en su vida y como ella vivió su vida", agregó la madre.

La celebración de la vida de Arroyo fue patente hasta en las prendas que sus familiares vistieron en la corte criminal, del color lavanda que era el favorito de Yadira.

Su compañera de trabajo no se ha vuelto a subir a una ambulancia desde su muerte y habló en el procedimiento judicial de la profunda huella que Arroyo dejó en el departamento de Bomberos y en la comunidad en general.

"La recordamos como un ángel que Dios puso aquí en el planeta, para llevar a los enfermos y los heridos al hospital para curarse, como los ángeles que bajan de los cielos ayudar a la gente que está sufriendo en la guerra. Esto es una guerra a veces, pero ella siempre estuvo ahí, siempre positiva", dijo la tía de Arroyo.

González inicialmente fue considerado no apto para ser juzgado hasta que profesionales de la salud el año pasado determinaron que su  incapacitad mental había concluido.  

sentencia Yadira