Inwood es, hoy día, uno de los vecindarios de inmigrantes más vibrantes de Nueva York.

Pero todo comenzó con una granja en la que, en 1785, se cultivaban desde manzanas a maíz para el resto Nueva York. Sus propietarios eran la familia Dyckman, inmigrantes holandeses.

La hacienda de 250 acres era una enorme propiedad que ahora es el vecindario de Inwood y parte de Washington Heights.

Originalmente, las tierras pertenecian a los nativos, la tribu Lenape; lo que propició un principio violento. 

De acuerdo con Naiomy Rodríguez, directora de Educación del Museo de la Granja Dyckman: "Porque como yo le digo a la gente, es como si alguien viene a tu casa y te dice que yo voy a vivir aqui. So, claro que la gente indígena no quería eso".

Por ser la parte más alta de la isla de Manhattan era un terreno difícil para el viaje. Por eso es que, además de los cutltvos, al área se convirtió en un punto de descanso para los viajeros que iban y venían del norte del estado. 

Todo cambió a principio del siglo XX con la llegada de la línea del tren 1 al área. Hubo un boom en 1932 tras la construccion de apartamentos y de la línea A. 

"Todavia había granjas por aquí hasta los cuarenta y cincuenta", señala Rodríguez.

Además de la llegada del tren al Alto Manhattan a principios de la década de los 1930, también fue inaugurado el puente George Washingtonque es un ícono de la ciudad de Nueva York.

Después olas de inmigrantes: alemanes, luego judios, irlandeses, cubanos, puertoriqueños y, finalmente, los dominicanos; quienes llegaron al comienzo de los años sesenta, despues del asesinato del dictador Rafael Leónidas Trujillo.  

Según Ramona Hernández, directora del Instituto de Estudios Dominicanos de CCNY: "Los dominicanos que estaban viniendo, que estábamos viniendo, éramos dominicanos pobres y entonces la transportación pública era importante". 

Ademas, los apartamentos en Washington Heights eran grandes y baratos. Se podían acomodar hasta dos familias.  

Ahora hay más de 100,000 dominicanos en "La pequeña Republica Dominicana". Pero la historia no termina aqui. El área es más popular que nunca y, para muchos, podría ser un problema: el reciente aumento en alquileres.