El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) anunció el miércoles que dejará de hacer arrestos, excepto los que se consideran "de misión crítica", hasta que la crisis del coronavirus haya pasado.

El cambio en la situación de la aplicación de la ley se produce en medio del brote de coronavirus y tiene por objeto limitar la propagación del virus y alentar a quienes necesiten tratamiento a que busquen ayuda médica.

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas dijo  en la noche del miércoles que "retrasará las acciones de aplicación" y que utilizará "alternativas a la detención" en medio del brote, según una notificación que la agencia envió al Congreso.

ICE dijo a los miembros del Congreso que sus "máximas prioridades son promover actividades de salvamento y seguridad pública".

"Durante la crisis de COVID-19, el ICE no llevará a cabo operaciones de aplicación de la ley en instalaciones de atención de la salud o cerca de ellas, como hospitales, consultorios médicos, clínicas de salud acreditadas y centros de atención de urgencia o de emergencia, salvo en las circunstancias más extraordinarias", decía la notificación al Congreso citada por varios medios de prensa, entre ellos los diarios The Washington Post y The New York Times. "Los individuos no deben evitar buscar atención médica porque temen que la aplicación de la ley de inmigración”.

ICE continuará sus operativos contra personas que hayan cometidos crímenes o contra aquellos que son una amenaza a la seguridad nacional.

No queda claro todavía qué pasará con los cerca de 37 mil detenidos que normalmente ICE tiene bajo su responsabilidad. Hay temor que debido a las pobres condiciones de los centros de detención se pudiera dar ahí un brote de coronavirus.

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