Elsa Mata es una de cientos de residentes del alto Manhattan que temen la llegada del fin de semana por las llamadas 'Coronafiestas callejeras'.

Multitudinarias reuniones clandestinas que visitantes sin escrúpulos organizan en el parque frente a sus edificios en esta esquina de Washington Heights.

Estas congregaciones incluyen carreras ilegales de autos, muchos reportados portando placas de taxi.

"Es un escándalo tan grande que uno no puede dormir. Yo tengo como tres días que no duermo. Por la mañana amanezco como nerviosa. Yo soy una señora enferma y ya con casi 80 años. Viene la policía atrás de ellos gritando también con las bocinas y es una cosa terrible, terrible. Yo no sé cómo los niños pueden dormir", detalla Mata, quien también es una persona de la tercera edad.

Otra preocupación de los vecinos es que quienes se reúnen aquí, en las noches, tampoco están usando cobertores faciales.

Así lo describe Celia García, otra residente de Washington Heights: "Entre 300 personas... Está inundado de personas sin mascarillas, caminando a las 3:00 de la mañana con música, fumando hookah, fumando mariguana y el olor a goma quemándose.Ayer uno de mis inquilinos también tuvo que llamar al Departamento de Bomberos".

Pero la madrugada del feriado ni los bomberos ni este autobús de pasajeros pudieron pasar porque la fiesta detuvo el tráfico.

Conforme el clima ha mejorado, las concentraciones siguen creciendo y terminando más tarde.

"Lo hemos reportado mucho a la policía, pero ellos burlan a la policía. Ellos después de que la policía se va de ahí, ellos vuelven", detalla Grace Torrejón quien también reside en Washington Heights.

Más allá del post en Facebook hace semanas del cuartel 34, que recuerda que las carreras de autos son ilegales y las concentraciones multitudinarias están prohibidas durante la pandemia, el NYPD no respondió hasta la noche del martes a nuestra solicitud de información. 

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