En varios videos que aparecen constantemente en redes sociales se muestra la actividad en los negocios de la calle Dyckman en Inwood.
Los videos han sido subidos por un grupo de residentes del área que se quejan de ruido y supuestamente la falta de distancia física entre los clientes.
Según los negociantes sin embargo, es una campaña para desprestigiarlos.
"Nosotros estamos preocupados en estos momentos de lo que pueda pasar en un futuro con nuestros negocios. Nosotros aportamos a la economía de este país", dijo Susana Osorio, dueña de varios restaurantes en Inwood.
Los pequeños comerciantes dicen que han obedecido todas las reglas estipuladas por las autoridades para evitar el contagio del COVID-19 desde que se les permitió servir a sus clientes al aire libre.
Pero el grupo de residentes, por medio de las redes sociales y la cuenta de Twitter “Inwood Keeping them Honest” o “Asegurando la honestidad de Inwood” muestran fotografías y videos de supuestas violaciones y copiando el contenido a las cuentas del alcalde y gobernador.
"Pero, ¿cómo nosotros, con los conocimientos que tenemos en esta industria vamos a hacer una cosa así?", agregó Osorio.
Señalan que también les llaman al 311 para acusarlos de hacer ruido, muchas veces mostrando videos tomados después que los negocios han cerrado.
"Quisiera saber por qué, si simplemente estamos aquí tratando de trabajar. Desde el 22 de junio trabajando y desde Dyckman hasta Seaman nadie de aquí le han dado un 'summons', le han dado un ticket, no han dado una penalidad, porque estamos siguiendo todas las reglas que ellos nos imponen", dijo por su parte Sandra Jaque, otra propietaria de restaurantres en Inwood.
Según los dueños de estos negocios, la campaña para desacreditarles ha llamado la atención de las autoridades que supuestamente ya no les permiten colocar mesas en gran parte de esta cuadra.
Dicen que desde entonces cada negocio ha perdido un promedio de 28 mesas los días de semana. Ahora solo pueden llenar la calle los fines de semana. Debido a eso, ha tenido que dejar sin trabajo a la mitad de su personal.
"Me siento como si ya no me quieren aquí en el área. Nosotros aquí en Papacito tenemos 13 años, 13 años sin problema", dijo Lynmarie Hernández, del restaurante Papacito.
El congresista Adriano Espaillat, también ha salido a la defensa de los negociantes.
"Un gran éxito aquí esta plaza, debería de ser permanente. Yo diría, creo que es un hostigamiento, un nivel de hostigamiento de parte de algunos residentes del área", dijo el congresista.
Y al menos otros vecinos no tienen problemas con lo que hacen los restaurantes.
"Yo hallo que todo está bien por aquí, digo yo", dijo una vecina.
"Yo he vivido aquí toda mi vida y nunca ninguna queja de de esta cuadra", dijo otra vecina.
Tratamos de contactar a la cuenta de Twitter, “Inwood Keeping Them Honest” pero hasta el momento no hemos recibido respuesta.
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