Javier Maldonado lleva más de 20 anos en la farmacia Mt. Carmel, en donde ayuda a pacientes a surtir sus recetas médicas.

Respecto a su experiencia, Maldonado la describe como: "Manteniendo los clientes y ayudando los clientes en lo que necesitan nunca es nada fácil".

Maldonado no es farmacéutico de profesión; es el director de operaciones de la farmacia, donde solo trabaja los fines de semana.

Durante la semana laboral, se desempeña como asesor financiero en un banco.

"Honestamente, somos esa luz brillante para nuestras comunidades, durante un tiempo que existe tanta confusión, tanto que no sabemos", explica Maldonado respecto a su labor.

Javier vivió en carne propia la crisis del coronavirus. Él y su esposa, que estaba embarazada dieron positivos al Covid-19. Ambos logragron sobreponerse al virus y la bebé está bien.

Mientras estaba enfermo no paró. Trabajaba desde su casa y, a veces, iba a la farmacia cuando estaba cerrada para asegurarse que la medicina estuviera lista para el siguiente día.

"Estando enferemo uno entiende más la enfermedad y entiende más lo que está sintiendo la persona. Entonces tienes más compasión cuando estamos sirviendo a esos clientes", detalla Maldonado.

Actualmente, las farmacias pequeñas aseguran que están perdiendo dinero porque los intermediarios que administran las prestaciones médicas de los clientes les han reducido sus reembolsos.

Y de acuerdo con Maldonado: "Es más difícil para nosotros mantener el negocio que tenemos. Es más difícil para nosotros seguir la lucha para nuestras comunidades y nuestros clientes".

A pesar de estas dificultades, la farmacia seguirá atendiendo a sus clientes para quienes pronto ofrecerá pruebas de Covid-19.

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