A partir del lunes los estudiantes de las escuelas publicas de Nueva York no tendrán que usar sus mascarillas cuando estén al aire libre, ta lo anunciado por David Banks, canciller de Educación.

Algo que es del agrado para algunos padres con los que hablamos cerca de la escuela pública 153, en Far Rockaway, Queens, quienes dicen que ya es tiempo de que vayan levantando esta restricción.

“Pues están tomando la iniciativa de también vacunar a los niños, así que, bueno, una cosa viene arreglando la otra, ¿no?. Así que es tiempo ya que vayamos quitando estas cosas, principalmente con nuestros niños", dijo Edwin Vásquez.

Los dos hijos de Vásquez dicen que esto le trae algo de alivio.

“Me siento bien porque ya no me va a molestar la mascarilla", dijo Jonathan.

“Yo creo que es bueno que se pueda hacer eso", agregó Samuel.

Los estudiantes podrán quitarse las mascarillas durante el recreo o cualquier otra actividad que no sea en el interior de la escuela.

El canciller dijo que gracias a las medidas tomadas han disminuido los casos de COVID en las escuelas en un 99%, por debajo del uno por ciento, menor que el promedio de la ciudad.

Pese a esto, algunos padres con los que hablamos, como Alba Luz Cruz, quien tiene tres hijas en las escuelas públicas, dicen que no quieren que ellas dejen de usar mascarillas, aun cuando estén al aire libre, especialmente la más pequeña.

“Yo voy a platicar con la profesora, que me haga el favor que a ella no se la quite porque ella padece de asma y si ella se me enferma es peor", dijo Cruz.

"Así me dijeron los doctores, que si alguien se enfermaba en la casa, ella se enfermaba peor, hasta parar en el hospital. Por eso le digo a la niña que siempre la use", agregó la madre.

Y Leidy Cruz, su hija mayor, quien ya ha tenido el covid tampoco cree que sea una buena idea.

“No, no es bueno, es muy malo porque se le puede pegar el coronavirus de nuevo. Porque el coronavirus te pega muy fuerte y ya no lo aguanta uno", djo Leidy.

La gobernadora Hochul por su parte, dice que quiere esperar los datos después de las vacaciones de invierno para tomar una decisión sobre el mandato de mascarillas en interiores.