El alcalde de Blasio reiteró una vez más el eslogan que le llevó a la reelección en noviembre: "Hacer de Nueva York la ciudad grande más justa del país".

En un discurso sin muchas novedades, ante unos dos mil asistentes, de Blasio hizo un llamado a reformar el sistema electoral de Nueva York, desde facilitar el voto, hasta reforzar un programa de financiación pública de campañas que limite las contribuciones privadas. 

"El cambio debe venir desde abajo, no desde arriba. Por eso, tenamos un plan para sacar los grandes intereses de la política y facilitar el voto para fortalecer nuestra democracia", enfatizó el Alcalde.

Para ello plantea la creación de un comité de revisión de la Carta Magna que proponga cambios que luego sean refrendados por los neoyorquinos. 

Por su parte, el presidente del Condado de El Bronx, señaló: "Si estamos hablando de a llegar a un nivel donde la ciudad es más justa debemos de empezar a darle calefacción a los residentes que viven en la Autoridad de Vivienda".

De Blasio también volvió a hacer un repaso de sus proyectos más significativos, desde su ambicioso plan de vivienda asequible a la creación de prekínder para niños de tres años, pasando por los bajos niveles de delincuencia en la ciudad.

Se comprometió a reunirse con líderes de Albany en cualquier momento y lugar para encontrar soluciones a la crisis del subway. El Alcalde ha sido reticente a la hora de comprometer más fondos municipales a un sistema que controla el gobernador Cuomo.

El concejal, Ydanis Rodríguez, opinó al respecto: "Tanto el speaker como otros colegas, yo, somos de los que creemos que la ciudad sí debe aumentar la inversión para la MTA pero que los fondos sean específicamente para proyectos designados para la ciudad".

Y con su mirada puesta en el gobierno de Donald Trump, de Blasio dijo que los neoyorquinos deben ser el antídoto de la enfermedad que enfrenta la nación. También dijo que en Washington luchará por los conocidos como soñadores.