La universidad Borough Community College en el bajo Manhattan recuerda un momento triste en su historia. 

"Hoy celebramos a todas las personas que perdimos en ese momento aquí en BMCC, en la universidad, en toda la ciudad y celebramos todos los héroes también que nos ayudaron a levantar la ciudad y no podemos nunca olvidar esos sacrificios", dijo Felix Matos Rodríguez, canciller de CUNY.

Con esta ofrenda floral, estudiantes, personal docente y administrativo de este centro de estudios, que está a pocas cuadras del World Trade Center, recordaron a sus 8 estudiantes y miembros de la facultad que murieron durante los ataques del 11 de septiembre.

Al momento de estrellarse el primer avión contra la torre norte, aquí se impartía clases y la universidad tuvo que ser evacuada y cerrada. La mitad de los fallecidos eran hispanos. 

"Muy triste y siempre deben ser recordados no importa si pasan 100 años o 20 años siempre deben ser recordados", dijo Kayle Chimbal, estudiante.

Y además de las pérdidas humanas, esta institución educativa también perdió uno de sus planteles que sufrió grandes daños cuando el edificio número siete del World Trade Center colapsó sobre él y tuvo que ser demolido. Una nueva edificación se ha levantado en su lugar. 

"Es apropiado que hoy tomemos el tiempo para reconocer su existencia y su importancia en las vidas de sus familiares, de su comunidad y aquí en BMCC, Para decir, sabemos quiénes son ustedes, le respetamos y nunca podremos olvidar lo que pasó el 11 de septiembre", dijo Anthony Munroe Presidente de BMCC.

El canciller Matos puso un mensaje en redes sociales en el que se refiere a la ceremonia en el BMCC sobre el 20 aniversario de 9/11.

Debido a su proximidad al World Trade Center, el NYPD y la policía de la autoridad de Puertos utilizaron los edificios de la universidad como un centro de comando donde se coordinaban tareas de recuperación y rescate.

Y después de los ataques terroristas se pensó disolver la universidad y enviar a los estudiantes y maestros a otras universidades CUNY de la ciudad de Nueva York. 

"Pero el presidente Pérez en esa época llamó a toda la gente que podía para que ayudara a llamar a los estudiantes, a buscar espacio donde podríamos dar clases y eso fue una experiencia fuertísima de solidaridad de espíritu colectivo", explicó Patricia Mathews Salazar, encargada del departamento de Estudios Étnicos y de Razas.

Además de los fallecidos de BMCC, 67 ex alumnos graduados de la universidad John Jay Jay, entre ellos policías y bomberos, también murieron durante los ataques. 

"Muchísimo otro personal también, a través de los años por las condiciones de salud todo el polvo que aspiraron en ese momento en las labores de rescate. Así que hay todo una pérdida de vidas humanas que tenemos que celebrar que tenemos que recordar", agregó el canciller Matos.