El presidente Joe Biden aprobó la noche del lunes la declaración de emergencia para el estado de Nueva York, el más afectado por la tormenta Elliot, para facilitar la ayuda federal necesaria para paliar sus efectos y atender a los afectados, informó la Casa Blanca en un comunicado.

Con esta declaración el Gobierno estadounidense aprueba la ayuda federal al gobierno estatal y los locales para hacer frente a las consecuencias de esta tormenta severa que ha causado la muerte de al menos medio centenar personas en todo el país, 27 de ellos en el noroeste del estado de Nueva York.

"Hablé con @GovKathyHochul para obtener una actualización sobre el clima invernal extremo que azota a Nueva York. Estamos listos para asegurarnos de que tengan los recursos que necesitan para superar esto.

"Mi corazón está con aquellos que perdieron a sus seres queridos este fin de semana festivo. Estás en mis oraciones y las de Jill", escribió el presidente en un mensaje en redes sociales.

 

 

El presidente autorizó así al Departamento de Interior y a la Agencia para el Manejo de Emergencias (FEMA) a coordinar las acciones que sean necesarias para afrontar esta situación y "aliviar la adversidad y el sufrimiento" provocados por el temporal.

Estados Unidos intenta recuperarse de los estragos provocados por el frente ártico que se ha llevado la vida de más de 50 personas, la mitad en la zona de Búfalo, en el estado de Nueva York.

La tormenta Elliot, calificada como "única en una generación" por el servicio meteorológico nacional (NWS, en inglés), ha causado gélidas temperaturas desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande (también llamado río Bravo), en la frontera con México.

Las fuertes nevadas y los vientos huracanados han dejado a miles de personas atrapadas en sus casas y en las carreteras, miles de pasajeros varados en Nochebuena por la cancelación de vuelos y miles de hogares sin luz por el colapso de la infraestructura eléctrica.