Bares y centros nocturnos agonizan por restricciones en NYC

Imágenes de jóvenes bailando en la calles se han vuelto muy cotidianas las noches de los fines de semana en Brooklyn, después de que los gobiernos del estado y de la ciudad prohibieran a los establecimientos nocturnos abrir sus puertas en interiores.

Algunos de estos negocios han podido mantenerse porque ofrecen comida. Sin embargo, otros se quejan de que el sector está agonizando mientras los clientes demandan que se reabran este tipo de locales.

Así lo explica June Ramírez , propietario de Salud Bar and Grill: "Tengo muchos colegas que no han podido abrir sus puertas porque no venden comida. Pero estos sitios, estos lounge, estos clubs, estas barras no tienen ni una cocina existente, entonces ellos no pueden ofrecer alcohol y han tenido que mantener sus puertas cerradas".

Los bares que han podido ofrecer bebidas en exteriores dicen que están en riesgo de cerrar porque su fuerte no es servir comida.

Y de acuerdo con Celene Rosado, del Sweet Brooklyn Bar and Grill: "Si uno quiere bailar, la música, un DJ, un ambiente en vivo, ellos ni quieren eso. Nosotros no somos de comida solamente, es un ambiente. Y el ambiente es lo más importante para vender con la comida y la bebida, pero es el ambiente pero uno no puede vender un ambiente para to go".

Esta semana pasada, el alcalde de Blasio dijo que no tienen fecha en la cual vayan a permitir a los restaurantes nuevamente recibir comensales adentro o a los centros nocturnos reabrir sus puertas

Empresarios de esta industria se quejan de que este viernes Nueva Jersey reabrió el servicio en interiores en bares y restaurantes. 

"Nueva York no se puede; pero Westchester, sí; Long Island, sí… Nosotros no entendemos por qué ellos están poniendo el punishment en New York City solamente porque todos los otros sitios están abiertos", comenta Rosado.

Salud solía ser un bar en donde había música en vivo antes de la pandemia. Hoy ellos dicen que debido a la prohibición de utilizar su espacio interior han perdido un 60% de la clientela

Y según el propio Ramírez: " Todo el cliente nocturno lo perdí porque incluso tenemos que cerrar a las 11 e la noche. Lo que quiere decir que mi cocina cierra a las 10".

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